Muchas veces surgen dudas, además de sobre cómo limpiar monedas antiguas, sobre el franqueo y las distintas tarifas que tenemos que tener en cuenta cuando queremos enviar una carta y que se corresponden con una serie de letras. En las siguientes líneas vamos a aclararlo.

El sello postal es el sistema tradicional de franqueo. Es un comprobante de pago previo de los envíos efectuados por correo en forma de etiqueta. Como seguro que has comprobado en más de una ocasión, los sellos se pueden personalizar para conmemorar acontecimientos o rendir homenaje a personajes públicos. Hace años en los sellos constaba un importe económico. A día de hoy, hay cuatro tipos de tarifas (A, A2, B y C) según el destino al que vayan dirigidas las comunicaciones. Vamos a verlas una a una:

  • A: es la tarifa para las cartas normalizadas de hasta 20 gramos para el ámbito nacional.

  • A2: cartas no normalizadas de hasta 20 gramos o bien para cartas cuyo peso esté comprendido entre 20 y 50 gramos.

  • B: tarifa de las cartas normalizadas de hasta 20 gramos para el ámbito internacional europeo.

  • C: tarifa de las cartas normalizadas de hasta 20 gramos para el ámbito internacional de resto de países.

Recuerda que se pueden usar tantos sellos como sean necesarios para completar el franqueo necesario en cada envío. En Filatelia Sanza – Monedas y Sellos te recordamos que los precios los revisa de forma anual el Consejo de Administración de la Sociedad Estatal Correos y Telégrafos. La meta es la progresiva adecuación a los costes y el mantenimiento de la calidad y eficiencia en la prestación del Servicio Postal Universal (SPU) a todos los ciudadanos. Por el mismo motivo, Correos, si quiere establecer nuevas tarifas, ha de seguir el procedimiento previsto en la Ley Postal. Como operador designado por el Estado para prestar el SPU, Correos y Telégrafos debe comunicar cualquier subida en sus productos y servicios con al menos tres meses de antelación a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMV). Esta verifica que se respetan los principios de precios asequibles, transparentes y no discriminatorios.